sábado, 30 de noviembre de 2013

BOLIVIA - El “doble aguinaldo” y la ecuación invertida del capital

Hugo Moldiz Mercado - http://www.la-epoca.com.bo/index.php?opt=front&mod=detalle&id=3096 

La determinación del gobierno de disponer el pago de “doble aguinaldo” a los trabajadores le ha movido el piso a la oposición, cuyos dirigentes y analistas solo han atinado a “denunciar” el carácter electoral de la medida, cuando, en realidad, si tuvieran un poco de honestidad intelectual, deberían admitir que es consecuencia de un proyecto político, con su consecuente modelo económico, que busca una mejor redistribución de la riqueza.

La medida, por tanto, no es excepcional. Un rápido repaso a los cerca de ocho años de gobierno revolucionario —de los que cuatro fueron en el Estado republicano y llegarán a cinco con el Estado Plurinacional—, permite apreciar varias medidas conducentes a dejar atrás el “capitalismo salvaje” al que nos condenaron gobiernos anteriores y, paralelamente ir construyendo, en un proceso, una sociedad con justicia social e igualdad de derechos y oportunidades para todos y todas en la perspectiva del socialismo comunitario hacia el Vivir Bien.

La madre de todas las medidas es la nacionalización del petróleo, cuya consecuente aplicación se ha traducido en la apropiación del excedente por parte del Estado y su reorientación para beneficio de la economía del país y de toda la población, aunque particularmente para los más golpeados por dos décadas de secante neoliberalismo. De ahí en más, el Estado productor ha recuperado otros recursos naturales entregados a las transnacionales, ha nacionalizado otras empresas “capitalizadas” por el gonismo y ha impulsado la creación de otras empresas productivas y de servicios.

Pero no solo eso. El nuevo modelo económico, a la par de ir desmantelando el neoliberalismo y los afanes conspirativos de la derecha anti democrática, asumió varias medidas para resolver, a favor del estado y el pueblo, la querella por el excedente.

Una de las primeras medidas que se tomó en la dirección de limitar la ley del valor (máximo beneficio para el capital y nada para el trabajador) fue cuando el empresario agroindustrial optó por privilegiar la exportación de azúcar y el aceite antes que satisfacer las necesidades de la población. Con la experiencia de lo que le hicieron a Allende en Chile (y ahora lo hacen contra la revolucionaria Venezuela) y Siles Suazo en Bolivia, el gobierno boliviano se vacunó a tiempo: condicionó las exportaciones de ese tipo de productos al previo abastecimiento del mercado interno.

Otra medida, casi simultánea a la anterior, fue la creación de EMAPA (Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos), con el objetivo de incentivar la producción de los pequeños productores de alimentos y sortear la “guerra económica” desarrollada por un sector de empresarios-políticos.

Pero eso no es todo. Para Evo Morales nunca ha sido suficiente que el estado empiece a tener más ingresos sino que una parte de esos recursos vaya directamente al bolsillo de la gente. Así se explica la creación de la Renta Dignidad y los bonos Juancito Pinto (para los niños) y Juana Azurduy de Padilla (para las mujeres embarazadas) que en su conjunto significa una cobertura del 38 por ciento de la población. Pero también está el incremento salarial en porcentajes superiores a los que se dieron en dos décadas de neoliberalismo, donde más bien predominó “aumento cero”.

Entonces, ni medida excepcional ni electoralista. Eso está bien para no reconocer que el gobierno está con la iniciativa. Lo que hay detrás del “doble aguinaldo” es la ratificación del carácter del modelo económico, del que uno de sus ejes es la inversión de la fórmula capitalista (producción social y apropiación privada de la riqueza) en las condiciones actuales. Es decir se trata de que el Estado y el empresariado privado le devuelvan a los trabajadores algo del plusvalor generado por ellos en la esfera de la producción o los servicios.

Los excedentes generados por el Estado, a diferencia del período 1952-1985, se reinvierten en proyectos productivos, de infraestructura y sociales, pero también se redistribuyen directamente a favor de la gente por la vía de los bonos y los salarios.

En el caso de los empresarios privados el gobierno apuesta a que la tasa media de ganancia obtenida en sus actividades, que en el proceso de cambio es superior a la registrada en dos década de neoliberalismo, sea compartida en una mínima parte con los trabajadores, una de las fuentes de su riqueza.

Lo demás es pura demagogia. Ninguna empresa va a quebrar por pagar un “doble aguinaldo” y si alguna corre riesgo es que ya está al borde de la quiebra.

    viernes, 22 de noviembre de 2013

    «El Gran Jefe Indio Latinoamericano» va por más

    Patricio Montesinos - http://www.liberacion.se/index.php/latinoamerica-y-el-caribe/america-2/1456-el-gran-jefe-indio-latinoamericano-va-por-mas
    8-evo
    La elección de Bolivia hace pocos días en la ONU como presidenta del Grupo de los 77+China, constituyó otra contundente victoria internacional del presidente Evo Morales, además de un nuevo y categórico revés para la maltrecha oposición en esa nación sudamericana.
    Con su modestia y sencillez características,  el bautizado como «Gran Jefe Indio Latinoamericano» ha echado por tierra de igual manera los intentos fanáticos y desesperados de Estados Unidos de evitar que el mandatario de la Pachamama (madre tierra) se convierta en un líder regional y mundial, como ha ocurrido en la práctica.
    Washington no ha podido frenar el prestigio ganado por el máximo dirigente del ejecutivo boliviano, ni siquiera con su plan macabro del secuestro del avión de Morales, ejecutado en julio pasado, con la complicidad de cuatro gobiernos europeos.
    Lejos de conseguir su propósito de restarle protagonismo, el régimen norteamericano de Barack Obamaha recibido uno y otro guantazo del «Gran Jefe Indio de la Patria Grande», como lo denominó su similar de Venezuela, Nicolás Maduro.
    La más reciente bofetada recibida por Estados Unidos fue la determinación por aclamación en la Asamblea General de Naciones Unidas de que Bolivia presida a partir de enero de 2014 el Grupo de los 77+China, integrado por 133 naciones, dos tercios de los Estados miembros de la ONU.
    La elección de la Pachamama al frente de esa importante agrupación de concertación internacional y que coordina  programas de cooperación, ocurrió a pocos meses de las elecciones generales bolivianas, previstas para octubre venidero,  lo que sin duda alguna se traduce en un nuevo espal-darazo a Morales de cara a los referidos comicios.
    Por el contrario, para la dividida y desprestigiada oposición tradicional en Bolivia, alentada y financiada desde siempre por Washington, el porrazo no pudo ser más duro en momentos en que apresura su campaña difamatoria con vista a la consulta popular del próximo año.
    En menos de dos años, Morales ha logrado relevantes triunfos en el escenario internacional no solo para su país, sino también para la unidad de América Latina, que lo han convertido en un indiscutible referente mundial.
    Sobresalen entre las conquistas del gobernante boliviano, el reconocimiento del acullico (mascado de la hoja de coca), y el haber conseguido que la ONU nombrara a 2013 «Año Internacional de la Quinua», el cereal oro de los Incas, y a él como su embajador.
    Otro destacado éxito de Morales y su pueblo fue la admisión por el Tribunal Internacional de La Haya de la demanda marítima interpuesta contra Chile por el derecho soberano de Bolivia a tener su anhelada salida al mar.
    Los acontecimientos hablan por sí solos, y auguran que con su humildad pero al mismo tiempo perseverancia  el «Gran Jefe Indio Latinoamericano» está llamado a consolidarse como una de las principales figuras de la Patria Grande con reputación planetaria, al igual que otros de sus homólogos de nuestra región que han dicho basta y  han echado a andar.

    viernes, 15 de noviembre de 2013

    Ley de Medios en Argentina:Un triunfo popular

    http://www.liberacion.se/index.php/tema-de-la-semana/1415-ley-de-medios-en-argentina-un-triunfo-popular 

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    El fallo de la Corte Suprema de Justicia de Argentina declarando constitucional la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, después de cuatro años de laberínticos juegos judiciales, al oponerse el Grupo Clarín a la desmonopolización en los medios de comunicación, es un hecho clave para consolidar la democracia informativa.

    De hecho, era una compleja situación donde el mayor grupo mediático del país, amparándose en complicidades judiciales, había logrado detener la aplicación de una ley votada por mayoría en el Congreso el 10 de octubre de 2009 y cuyo proyecto fue redactado en 22 años de debates por todos los sectores sociales.

    Con esta Ley se dejaba atrás la legislación impuesta por la pasada dictadura militar (1976-1983), que había logrado sobrevivir al proceso de transición democrática abierto a finales de 1983 y que cumplió 30 años este 30 de octubre pasado.

    Durante 22 años, universidades, profesionales, periodistas, intelectuales, sindicatos, movimientos sociales y humanitarios debatieron sobre lo que sería el proyecto finalmente presentado por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en agosto del 2009 al Congreso. Allí también hubo debates, presentaciones testimoniales ante las comisiones legislativas.

    Imposible encontrar en la historia nacional una ley tan democráticamente participativa. Por eso fue votada por la mayoría en ambas Cámaras y pudo festejarse este enorme triunfo en octubre de 2009.

    Pero el Grupo Clarín impuso una medida cautelar el 26 de octubre de ese mismo año y desde entonces comenzó la madre de todas las batallas, entre un Estado nacional en recuperación de derechos y soberanías y un grupo monopólico, con un enorme poder económico, que constituía uno de los ejes del verdadero poder, acompañando las dictaduras militares de turno.

    Desde que llegó el ya fallecido presidente Néstor Kirchner al poder en 2003, Clarín comenzaría a convertirse en lo que es en estos tiempos: la virtual jefatura de la oposición contra el gobierno de recuperación nacional, que continuó por elección popular en 2007 la ex senadora Fernández de Kirchner, reelegida en 2011.

    La mandataria debió enfrentar–y lo sigue haciendo– una guerra sin cuartel encabezada por el Grupo Clarín con más de 250 canales de cable, periódicos, radios, canales de línea, que han monopolizado la información a nivel nacional, desinformando sistemática-mente y formando opinión, a través de su poderosa red sin competencia a ese nivel.

    Después de un camino sinuoso donde sólo se podía aplicar mínimamente la Ley, porque era continuamente retenida en maniobras judiciales que degradaron a la justicia, la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA) creada por el gobierno para aplicar la norma, logró que se presentaran en 2012 los proyectos de desinversión por parte del resto de los grupos mediáticos.

    Sólo Clarín resistía el cumplimiento de la medida. Finalmente la Corte debió definir esta injusta situación pero se hizo esperar. Cuatro años pasaron de luchas y maniobras que retrasaban ilegalmente una ley de la nación.

    Por eso este 29 de octubre miles de personas llegaron a la Plaza de los Dos Congresos a festejar al fin la recuperación de la justicia y posibilidad de construir por fin un proyecto liberador, que funcionando mínimamente logró dar voz a los sin voz.

    Esto se advierte en la aparición de las radios comunitarias de los pueblos originarios, como un ejemplo de lo que puede hacer un país, para devolver la información a manos del pueblo y otras experiencias que harán historia en la región.

    La Ley de Medios, como se le llama, ha sido valorada por funcionarios de la UNESCO como un modelo de democratización informativa, que al fin podría enfrentar no sólo la desinfor-mación, que intenta degradar la conciencia de los pueblos, sino los entretenimientos, uno de los proyectos mejor concebidos para degradar a nuestras sociedades.

    Perversamente estos entretenimientos son verdaderas armas de destrucción masiva de conciencia, cultura, identidad, lenguaje imaginado este como una verdadera construcción social de los pueblos. Todo esto para poder avanzar en el proyecto de recolonización trazado en oficinas de Guerra de Baja Intensidad en Washington, para lo cual también se instaló el esquema de espionaje global, que nos afecta.

    Ahora comenzará y de hecho ya ha comenzado, la búsqueda de apoyo internacional por parte del Grupo Clarín y sus más cercanos asociados para tratar de imponer desde afuera la injusticia que se les ha vedado desde adentro.

    Sin duda la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), es decir la Sociedad Interamericana de los dueños de grandes empresas monopólicas mediáticas, comenzará su accionar contra esta ley que verdaderamente rescata la libertad de expresión, la diversidad de las voces y la posibilidad de luchar contra una información convertida en arma de guerra y en arma de acción contrainsurgente contra los proyectos populares.

    Para la SIP la libertad de expresión seguirá siendo la libertad de empresas dispuestas a manejar los hilos del poder económico que siempre abre las puertas a la dominación externa. Y a las dictaduras de turno y a los sueños hegemónicos, que nuestra América está dispuesta a resistir.

    jueves, 7 de noviembre de 2013

    El arte de desmonopolizar

    FERNANDO BUEN ABAD DOMÍNGUEZ* - http://www.loquesomos.org/index.php/es/la-calle/saberes-publicos/10844-el-arte-de-desmonopolizar 

    Desmonopolizar el “mercado audiovisual” es una audacia de valor histórico mundial. Sin exageraciones. La “Ley de Medios”, o Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, como es su nombre oficial, en Argentina, ha abierto espacios de análisis y acción trascendentales. Pero, especialmente, dejó en claro que proclamar una ley no implica su cumplimiento inmediato, que una guerra de intereses puede paralizar incluso las más “nobles intenciones”. Dejó en claro que los argumentos legales exigen argumentos y acciones políticos, movilizados desde las bases. Exhibió el repertorio de trampas, elusiones, falsedades y escapismos que un sector oligarca como el “Grupo Clarín” puede ensayar con impunidad e impudicia a mansalva. Mostró con crudeza que el escenario de la lucha de clases y Argentina ha ganado gran una batalla para la etapa actual democratizadora de la “comunicación” y sólo tendrá valor si se la profundiza de inmediato y abiertamente. El “malestar” oligarca tenderá a empeorar y la necedad del monopolio “Clarín” no se extinguirá sólo porque la ley lo ordene. El desafío no es sólo “local” y no alcanza con las leyes para transformar al mundo.

    El reloj jurídico activó al reloj cultural. No hay tiempo que perder, Clarín debe acatar la ley y eso, ni con mucho, es lo más difícil de la tarea que se ratifica por el fallo de la Corte, no exento de amenazas de una ofensiva embriagada con obviedades burguesas, intoxicada con odio y viciada de origen por la ira de un sector oligarca acostumbrado a reinar a sus anchas. No debe subestimarse la ofensiva oligarca porque no se trata, sólo, de una pataleta localista cargada con histrionismo de clase y melancolías aristócratas. Se trata, también, de una operación golpista internacional que tiene en el grupo Clarín uno de sus mascarones de proa favoritos. Eso es un problema se seguridad nacional y regional aunque muchos se empeñan en no verlo.

    Es imprescindible encender alertas y activarse en dos frentes generales, inmediatos, en materia de defensa y en materia de ofensiva cultural transformadora. En simultáneo. Está a la vista el respaldo “patotero” del grupo PRISA de España, CNN de Miami, Televisa de México, Globovisión de Venezuela, Caracol de Colombia, Mercurio de Chile, O’Globo de Brasil… en fin, la red de oligarcas mediáticos en todo el continente… y de la infaltable SIP (Sociedad Interamericana de Prensa), la Red Mundial de Editores (incubada por el propio Grupo Clarín) y otra pléyade de “comunicadores” serviles a los intereses del capitalismo y de sus púlpitos mediáticos. La crema y Lanata de la estulticia golpista.

    Urge una revolución semántica y estilística desde las bases. Urgen las escuelas de formación de cuadros para la comunicación emancipadora. Tenemos enfrente lo más difícil que consiste producir una agenda emancipada y emancipadora; en no repartir la semántica de los patrones ni sus estilos odiosos y remanidos. En un país atacado por algunos focos ideológicos de ínsulas chauvinistas es necesario impulsar buen frente único internacionalista que hermane la lucha argentina con las otras luchas que, en un sentido similar, están en marcha en todo un continente y buena parte del mundo. Bien vendría romper todo sectarismo apoyándonos en un Frente Único, rico y muy activo que defienda ésta y otras “Leyes de Medios” para seguir superando el desastre creado por el capitalismo y sus “medios”. Bien vendría ser capaces de acompañar a los que ya están en lucha, sumando otras luchas, para que el extraordinario contenido político ganado desde abajo, y desde la Historia del pueblo argentino, para la “Ley de Medios”, se multiplique y enriquezca.

    * Universidad de la Filosofía / Rebelión